Por más que quiera, no va a meter a su hija (o) en una burbuja libre de azúcar y dulces, en las fiestas.
Tendrá su “fiesta de la alegría” de la que va a llegar con dulces que le pueden rendir para todo el 2017, y además, en toda fiesta de seguro estarán abuelitas, tíos, tías, amigos, etc. acosando con ofrecer azúcar a toneladas.
Está perfecto, querer darle lo mejor para sus hijos en cuanto a salud, pero como todo, los extremos no son buenos. Si se pone a restringir en exceso, solo va a hacer que sus hijos deseen más esos dulces, y tiendan a abusar más en Navidad.
¿Quiere que sus hijos no se obsesionen con los dulces?? Tome nota de los siguientes “mandamientos” y verá como todo fluye súper bien en esta Navidad y todas las fiestas .
# 1 NO HABLARÁS DE BUENOS Y MALOS
Súper importante dejar estas etiquetas.
Para empezar sus niños no entienden muy bien comer la galleta no es buena , porque tiene azúcar, etc..
Ellos aprenden que algo es bueno porque les gusta y les hace sentir bien. Me comí la galleta, me gustó, me siento bien, ¡lo que significa que la galleta es buena!
Segundo, niños pequeños lo que entienden es que son ellos los que son buenos o malos, por comer o no comer algo. Poniendo etiquetas no logra que no coman la galleta, lo que logra es que igual se la comen, pero sintiéndose súper mal, porque me han dicho que soy malo si la como..
# 2 RECORDARÁS QUE SALUD POCO TIENE QUE VER CON LO QUE PONES EN EL PLATO
“Salud” no es “lograr” que sus niños coman el mínimo de dulce.
De hecho, le puedo asegurar que poco tiene que ver con que coman galletas o zanahorias de merienda.
Salud ante todo es amor y disfrute de la vida. Es mucho más saludable que compartan una galleta con su abuelita en paz, que usted interfiera para que no la coma causando estrés y ansiedad con la comida.
# 3 NO PROHIBIRÁS
Nada más atractivo que lo que no podemos tener.. ¿no? ¿Ha hecho dieta y jurado que no se va a volver a comer el tamal esta Navidad?? ¿Cuénteme cómo le va con esa promesa…??
Si quiere que sus hijos se obsesionen con lo dulce, la fórmula es prohibirlo. Deje de sermonear y poner prohibidos, y verá como mágicamente pierden el interés..
# 4 OFRECERÁS POCO FRECUENTE, SIN DRAMAS Y CASUAL
No se trata de ponerles todos los días confites y queque de merienda, PERO si usted ofrece algunos días ese bendito dulce, sin dramas, sin comentarios, simplemente casual, pierde el atractivo.
Es lógico que lo vayan a comer felices, y talvez algunos días abusen si usted lo ha prohibido, pero si ven que es algo natural , de lo que no hay dramas, van a ir perdiendo ese impulso de comerse todo.. El impulso de comer todo de un solo viene cuando se sienten restringidos, cuando sienten que es “ahora o nunca”, porque después no me dejan comer más (lo mismo le puede pasar a usted cuando está a “dieta” y se come lo prohibido, entra en mentalidad de última cena y abusa, porque jura que nunca lo comerá de nuevo).
Solo recuerde, si ofrece dulce de postres, limite la cantidad, porque compite con otra comida, por ejemplo, usted dice cuántas galletas o confites son el postre de cada uno.
Si es meriendas, deje que ellos elijan cuánto, y confíe.
# 5 LES DEJARÁS EN PAZ EN LAS FIESTAS
Los niños que se comen todo el queque y dulces son los que su mamá anda detrás diciéndoles que no coman.. ¿lo ha observado??
Los niños usualmente quieren jugar, más que comer, la comida es atractiva solo cuando se les prohibe.
Si tienen paz, no van a abusar porque saben que es algo que pueden comer en otro momento. Si usted anda detrás diciéndoles que no, de nuevo entran en mentalidad de última cena, y abusan.
Confíe en ellos. Es probable que una primera vez abusen si les ha tenido muy limitados, pero después solitos aprenden y dejan de abusar.
Además, si sus niños se alimentan bien, un día de fiesta no les va a hacer daño.
# 6 NO PERDERÁS LA PAZ, PORQUE TODO EN LA VIDA DE TU HIJO SEA “SUGAR FREE”
De nuevo, si sus hijos comen comida real, mínimo de procesados, que el queque de Navidad o las galletas sean normales, con azúcar no les va a a matar, van a estar bien. ¡En serio!!
Todo en esta vida es balance.
¡¡Es más dañino el estrés y la culpa, que el azúcar!
Si necesita más apoyo con ese balance de la comida en sus niños mándeme un inbox para una sesión personal, o puede llamar a Clínica Pediátrica Kidoz 22910505. En Navidad tenemos sesiones especiales para familias.