1. Vas a ganar y perder algunos amigos.
Vas a hacer amistad con gente que nunca pensaste tener amistad. Vas a compartir enseñanzas, angustias y consejos con gente en el play de tu condominio, en el kinder o en la escuela, y de repente te convertirás en aliada y amiga por siempre. Desafortunadamente hay otro lado de la moneda, debes prepararte para perder algunas amistades después de tener hijos, ya que no vas a tener la misma energía, algunas veces vas a estar molesta y eso solo lo comprendarán otras mamás.
2. Vas a sentir empatía con otras mamás.
Esa mirada asesina que le disparaste a los padres con niños que lloran en el avión hace unos años? Definitivamente no tenías idea, y ahora mirás atrás y piensas que debiste actuar diferente. Ahora más bien intercambias miradas de comprensión y casi de hermandad con otras mamás.
3. Vas a aprender una nueva fórmula.
Toma las horas que pasaste viendo al muchacho que te gustaba en el colegio o la universidad, multiplica eso por 100 y obtendrás el número de horas que estarás viendo a tu hijo o hija durmiendo.
4. Vas a tener una nueva idea de lo que es una vacación.
Un momento en el salón de belleza o una pedicura serán el equivalente emocional y espiritual a un viaje a Bahamas.
5. La vanidad tendrá otro sentido.
Si para mantener a tu hijo o hija feliz necesitas hacer sonidos, caritas de mono, hablar como bebé o lo que sea, lo harás sin preocuparte por las apariencias.